Versos Paralelos La Biblia de las Américas Los montes fueron cubiertos con su sombra, y los cedros de Dios con sus ramas. Nueva Biblia Latinoamericana Los montes fueron cubiertos con su sombra, Y los cedros de Dios con sus ramas. Reina Valera Gómez Los montes fueron cubiertos de su sombra; y sus sarmientos fueron como cedros de Dios. Reina Valera 1909 Los montes fueron cubiertos de su sombra; Y sus sarmientos como cedros de Dios. Biblia Jubileo 2000 Los montes fueron cubiertos de su sombra; y sus ramas como cedros de Dios. Sagradas Escrituras 1569 Los montes fueron cubiertos de su sombra; y sus ramas como cedros de Dios. King James Bible The hills were covered with the shadow of it, and the boughs thereof were like the goodly cedars. English Revised Version The mountains were covered with the shadow of it, and the boughs thereof were like cedars of God. Tesoro de la Escritura goodly cedars. Salmos 104:16 Enlaces Salmos 80:10 Interlineal • Salmos 80:10 Plurilingüe • Salmos 80:10 Español • Psaume 80:10 Francés • Psalm 80:10 Alemán • Salmos 80:10 Chino • Psalm 80:10 Inglés • Bible Apps • Bible HubLas citas Bíblicas son tomadas de La Biblia de las Américas © 1986, 1995, 1997 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, //www.lockman.org. Usadas con permiso. Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia de los Hispanos © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, //www.lockman.org. Usadas con permiso. Reina Valera Gómez (© 2010) Contexto Súplica por la restauración del pueblo …9Limpiaste el terreno delante de ella; echó profundas raíces y llenó la tierra. 10Los montes fueron cubiertos con su sombra, y los cedros de Dios con sus ramas. 11Extendía sus ramas hasta el mar, y sus renuevos hasta el río.… Referencia Cruzada Génesis 49:22 Rama fecunda es José, rama fecunda junto a un manantial; sus vástagos se extienden sobre el muro. Cantares 5:15 Sus piernas, columnas de alabastro asentadas sobre basas de oro puro; su aspecto, como el Líbano, gallardo como los cedros. Ezequiel 31:8 ``Los cedros no lo igualaban en el huerto de Dios; los cipreses no se podían comparar con su ramaje, y los plátanos no igualaban sus ramas. Ningún árbol en el huerto de Dios podía compararse a él en su hermosura. |