Nueva Biblia Latinoamericana 1Salmo de David. Bendito sea el SEÑOR, mi Roca, Que adiestra mis manos para la guerra, Y mis dedos para la batalla. 2Misericordia mía y fortaleza mía, Mi baluarte y mi libertador, Escudo mío en quien me he refugiado, El que sujeta a mi pueblo debajo de mí. 3Oh SEÑOR, ¿qué es el hombre para que Tú lo tengas en cuenta, O el hijo del hombre para que pienses en él? 4El hombre es semejante a un soplo; Sus días son como una sombra que pasa. 5Oh SEÑOR, inclina Tus cielos y desciende; Toca los montes para que humeen. 6Despide relámpagos y dispérsalos; Lanza Tus flechas y confúndelos. 7Extiende Tu mano desde lo alto; Rescátame y líbrame de las muchas aguas; De la mano de extranjeros, 8Cuya boca habla falsedad Y cuya diestra es diestra de mentira. 9Oh Dios, un cántico nuevo Te cantaré; Con arpa de diez cuerdas cantaré alabanzas a Ti, 10El que da la victoria (salvación) a los reyes, El que rescata a David Su siervo de la espada maligna. 11Rescátame y líbrame de la mano de extranjeros, Cuya boca habla falsedad Y cuya diestra es diestra de mentira. 12Sean nuestros hijos en su juventud como plantíos florecientes, Y nuestras hijas como columnas de esquinas labradas como las de un palacio. 13Estén llenos nuestros graneros, suministrando toda clase de sustento, Y nuestros rebaños produzcan miles y diez miles en nuestros campos. 14Esté cargado nuestro ganado, Sin fracasos y sin pérdida, Y no haya gritos de alarma en nuestras calles. 15Bienaventurado el pueblo a quien así le sucede; Bienaventurado el pueblo cuyo Dios es el SEÑOR. Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia Latinoamericana © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, //www.lockman.org. Usadas con permiso. Bible Hub |