Nueva Biblia Latinoamericana 1Al tercer día se celebró una boda en Caná de Galilea, y estaba allí la madre de Jesús;
2y también Jesús fue invitado a la boda, con Sus discípulos.
3Cuando se acabó el vino, la madre de Jesús Le dijo: "No tienen vino."
4Y Jesús le dijo: "Mujer, ¿qué nos interesa esto a ti y a Mí? Todavía no ha llegado Mi hora."
5Su madre dijo a los que servían: "Hagan todo lo que El les diga."
6Y había allí seis tinajas de piedra, puestas para ser usadas en el rito de la purificación de los Judíos; en cada una cabían dos o tres cántaros (unos 100 litros).
7Jesús les dijo: "Llenen de agua las tinajas." Y las llenaron hasta el borde.
8Entonces les dijo: "Saquen ahora un poco y llévenlo al mayordomo." Y se lo llevaron.
9El mayordomo probó el agua convertida en vino, sin saber de dónde era, pero los que servían, que habían sacado el agua, lo sabían. Entonces el mayordomo llamó al novio,
10y le dijo: "Todo hombre sirve primero el vino bueno, y cuando ya han tomado bastante, entonces el inferior; pero tú has guardado hasta ahora el vino bueno."
11Este principio de Sus señales (milagros) hizo Jesús en Caná de Galilea, y manifestó Su gloria, y Sus discípulos creyeron en El. 12Después de esto Jesús bajó a Capernaúm con Su madre, Sus hermanos y Sus discípulos; pero no se quedaron allí muchos días. 13La Pascua de los Judíos estaba cerca, y Jesús subió a Jerusalén. 14En el templo encontró a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, y a los que cambiaban dinero allí sentados. 15Y haciendo un látigo de cuerdas, echó a todos fuera del templo, con las ovejas y los bueyes; desparramó las monedas de los que cambiaban el dinero y volcó las mesas. 16A los que vendían palomas les dijo: "Quiten esto de aquí; no hagan de la casa de Mi Padre una casa de comercio." 17Sus discípulos se acordaron de que estaba escrito: "EL CELO POR TU CASA ME CONSUMIRA." 18Entonces los Judíos Le dijeron: "Ya que haces estas cosas, ¿qué señal nos muestras?" 19Jesús les respondió: "Destruyan este templo, y en tres días lo levantaré." 20Entonces los Judíos dijeron: "En cuarenta y seis años fue edificado este templo, ¿y Tú lo levantarás en tres días?" 21Pero El hablaba del templo de Su cuerpo. 22Por eso, cuando resucitó de los muertos, Sus discípulos se acordaron de que había dicho esto; y creyeron en la Escritura y en la palabra que Jesús había hablado. 23Cuando Jesús estaba en Jerusalén durante la fiesta de la Pascua, muchos creyeron en Su nombre al ver las señales que hacía. 24Pero Jesús, en cambio, no se confiaba en ellos, porque los conocía a todos, 25y no tenía necesidad de que nadie Le diera testimonio del hombre, porque El conocía lo que había en el interior del hombre. Las citas bíblicas son tomadas Nueva Biblia Latinoamericana © 2005 by The Lockman Foundation, La Habra, Calif, //www.lockman.org. Usadas con permiso. Bible Hub |